Son problemas en los que el ciclo de sueño-vigilia de una persona no se ajusta a los tiempos en los que necesita estar dormida o despierta.
A diferencia de otros problemas del sueño, el ritmo circadiano causa somnolencia cuando se necesita estar despierto y vigilia cuando se necesita dormir.
(American Thoracic Society [ATS], 2014).
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Tipos de trastornos del ritmo circadiano.
Los tipos de trastornos del ritmo circadiano del sueño son:
Retraso de la fase del sueño:
Dificultad para dormirse a una hora “normal”.
Adelanto de la fase del sueño:
Dormir temprano y despertar de madrugada.
Desfase horario:
Cambio de una zona horaria a otra.
El trastorno del trabajo por turnos:
Trabajar en la noche y dormir en el día.
El síndrome hipernictemeral:
El periodo de sueño cambia todos los días de 1 y 2 horas más tarde.
El ritmo de sueño-vigilia irregular:
Dormitar de forma intermitente.
(ATS, 2014).
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8 tips para tratar los trastornos del ritmo circadiano.
El objetivo del tratamiento es ajustar el patrón de sueño a un horario que permitan satisfacer las demandas del estilo de vida.
El tratamiento es:
Tiempo suficiente para dormir.
Mantener horarios regulares.
Evitar dormir la siesta si hay dificultad para dormir después.
Dormir en una habitación oscura, fresca y silenciosa
(ATS, 2014).
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8 tips para tratar los trastornos del ritmo circadiano.
Evitar la cafeína y el alcohol seis horas antes de acostarse.
Tomar melatonina (hormona del sueño) ya que es útil en ciertas situaciones.
Planificar comidas y actividades en horarios regulares para restablecer el ciclo de sueño-vigilia.
Evitar exponerse a la luz de dispositivos electrónicos cerca de la hora de dormir.
(ATS, 2014).
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