Las carnes proporcionan proteínas de alto valor biológico, grasas, minerales como hierro, potasio, fósforo y zinc, y vitaminas del grupo B.
La carne contiene grasa saturada, sin embargo, la cantidad dependerá del tipo de carne y de la pieza elegida.
(Martínez y Pedrón, 2016).
Algunos ejemplos de carnes son:
Ave.
Vacuno.
Cerdo.
Cordero.
Conejo.
(Martínez y Pedrón, 2016).
Entre los minerales que contiene la carne, se debe destacar el hierro, ya que este se absorbe en mayor cantidad en comparación del proveniente de los alimentos de origen vegetal.
La intensidad del color rojo de la carne depende del contenido de una proteína llamada mioglobina.
(Carbajal, 2013).